DOLCE & GABBANA, arte y belleza clásica italiana

Para Dolce & Gabbana , la belleza es singular. Dolce & Gabbana emana esencia italiana. Su lema, el más repetido, FATTO A MANO, alega la labor artesanal, la tradicional. Dolce & Gabanna sorprendía emitiendo su desfile live en Instagram, desde Florencia. La Florencia de Miguel Angel, de Boticelli y de Da Vinci. En el corazón de La Toscana, Florencia es, sin duda, el escenario idóneo para desfilar arte rodeado de arte.

El renacimiento italiano y la clásica belleza italiana se dejan entrever en las creaciones artesanales. Dolce & Gabbana es una mezcla de materiales, un alto sentido creativo, que juntos dan lugar al nacimiento del arte povera (arte pobre) que representa la marca.

Dolce & Gabbana es estética mediterránea, cientos de años de arte y tradición.

¿ Y como no amar Dolce & Gabbana?

La estética de esta marca tiene una base realista. Dolce & Gabbana reclama lo voluptuoso y las caras más singulares. Lo contrario de los limites. Simplemente retrata belleza, sin importar la edad, ni los estandartes ya pasados de moda.

Dolce & Gabbana ha dejado de ser Monica Belucci y Sofia Loren hace tiempo. En el recuerdo queda también Madonna de los años 90, encorsetada.

En todas las colecciones, hasta la más reciente, Dolce & Gabbana presume de estampados. Girasoles, rosas en color rojo ensangrentado, que recuerdan a la vida y al pleno vivir, limones y naranjas o el omnipresente estampado de lunares. Es tanto el arte de los dos directores creativos, que incluso los combina. La joyería y los adornos de Dolce & Gabbana deben ser bien cargados. Y si no deslumbran los estampados, lo hacen los encajes negros, recordándonos a las manos que, con innegable destreza, tejen la transparencia.

Dolce & Gabbana presenta varias colecciones cada año, masculinas y femeninas, y que son rebosantes de belleza clásica. Casi descaradas, se podría decir.

El arte, en su cuna, es la fuente de inspiración y creatividad más rica y generosa que puede haber.

De los bolsos clásicos de Dolce & Gabbana, entre modelos como es el Devotion, el Amore o el Kendra, en formatos mini o no, con toda seguridad destaca el Sicily, homenaje al punto de partida. Éste bolso tote, fabricado de manera  artesanal, en su versión estampada de limones, es el preferido de todas.

Retrato a la belleza italiana. Igual que en una película de Fellini.

Los diseños Dolce & Gabbana suelen ser sencillos, embellecidos con flores y bordados, para reavivar el placer de pisar, por primera vez, Italia. Dolce & Gabbana vuelve a Florencia y, con ello, vuelve al arte. No antes olvidar escenario previos como Sicilia, Milan, Capri e, incluso, Sevilla. Lo autentico es la clave, simplemente nos hace sentir la belleza latente.

Dolce & Gabbana afirma su singularidad a través de la belleza, en su cuna: el arte.